Hay días en que llego a la sauna en solo plan de pasar
el rato. ¡Os hablo en serio! No se trata solo de ir a follar; aunque debo
reconocer que el 98% de las veces ese es el plan, hay días que domina el restante 2%.
XXX
Yo todavía estaba en mi larga estancia en Barcelona y
decidí darme una vuelta por la Corintio. Entré a la sauna de vapor y como a eso
de haber pasado cinco minutos entró un chico negro, de cabellos afro, ojos color miel (se los vería a la salida), delgado y con su llave puesta en el brazo izquierdo,
enganchados entre la goma de la llave, cargaba unos seis condones. Este chico
sabe lo que quiere, pensé, de seguro tiene un enorme pollón.
XXX
Como os comentaba, yo iba en plan relax. Al rato llegó
un tío que se sentó al lado del negro y sin perder tiempo se quitó la toalla
luciendo un buen miembro de unos 17 centimetros en estado morcillón. Glande
grande y venoso, testículos también grandes pero no afeitados. No habían pasado
cinco segundos cuando el negro se lanzó de bruces a comerle la polla al tío,
que a pesar de lucir un poco gordito, de su barriga salía de manera destacada, altiva y orgullosa, una enorme polla.
XXX
La negra se quitó la toalla y se tumbó de lado,
dejando a la vista una enorme polla en estado morcillón aún. Como estaba justo
a mi izquierda, me quité la toalla también y decidí pajear a la negra mientras
yo me hacía lo que denomino una paja mortuoria: dícese de aquella paja que se hace
por compromiso social o aburrimiento sin esperar acabar. A pesar de que su
verga no terminaba de parársele, la negra tenía una polla durísima y toda
rasurada. Era una verga enorme, de esas que solo sirven para pajear, pues no te
caben en la boca para hacer una mamada y tampoco caben en el culo. ¡Era
realmente enorme!
XXX
La negra después de una buena jornada de mamadas al
tío, decidió que era tiempo de que le dieran por el culo. Se sacó un condón de
los que cargaba en su cinto de guerrera amazónica de las penumbras del vapor, y
le puso el preservativo al tío. Creo que no aguantará mucho, pensé, se nota que
esta negra tiene talento en las mamadas. La negra después de asegurarse que el
condón estaba bien puesto se sentó sobre el tío. Tuve la impresión de que la
polla del tío entro suave y sin problemas en el ojete de la negra. Yo quería hacerle
una buena paja a la negra, pero estaba fuera del alcance de mi brazo y no sé
por qué, preferí dejar que los tórtolos continuaran solitos.
XXX
No habían pasado cinco minutos cuando el tío gritó que
se venía. La negra meneó ese culo como una verdadera máquina de follar y el
grito de varios ¡ay! ¡ay! ¡Qué gusto me das! Salió de la voz del tío. Al
terminar, la negra muy gentilmente le retiró el condón y salió, imagino que a
por una ducha. El tío decidió salir también. Yo mientras tanto, continuaba en mi paja
mortuoria y no se me terminaba de parar.
XXX
Decidí quedarme a descansar, dejé la paja para
después. En medio del calor y el sudor me estaba quedando dormido cuando de
pronto sentí a la negra que se sentaba justo a mi lado. Decidí colaborar y quitarme la toalla, no lo había terminado de hacer cuando la negra se lanzó de forma desesperada
a comerme la polla como si fuera el último alimento intergaláctico existente en
el mundo mundial. Yo me relajé, pues aunque no iba de ánimos para follar, la
verdad es que no me importaba que se entretuviera mamando.
XXX
Pero la negra
sabía mamar muy bien y la polla se me puso dura. La envergadura creció por
encima de mi tamaño promedio. Además, la negra sabe como dar un placer
completo. Me lamía las bolas o mientras me chupaba el glande me apretaba con
fuerza el tallo del pene. De vez en cuando un dedo se asomaba en mi ojete el
cual le ofrecía con desparpajo pero la negra desgraciada no se atrevía a hurgar
en mis entrañas con la finalidad de mantenerme excitado todo lo posible.
XXX
Justo cuando tenía mi pene en su mayor tamaño, como
hacía tiempo que no lo tenía, la negra decidió ponerme un condón. ¡Hoy follo!
Pensé. Pero, precisamente, por sentirme tan cansado, apenas la negra dejó de
mamar para abrir el condón, mi pene comenzó a ponerse flácido. Pero la negra se
las traía, y continúo mamando hasta que logró abrir el condón y ponérmelo.
Rápidamente, sin tiempo que perder, la negra cogió mi pene y lo dirigió a su
culo entrando suave y serenamente. Tenía un hoyuelo delgadísimo, pero que se
iba abriendo sin problemas. Además, después de la follada del otro tío, este
culo estaba presto a dilatarse.
XXX
La negra comenzó a moverse y a dar unos griticos de
placer. Yo comencé a pajearle. Su pene seguía sin adquirir una consistencia
rocosa, pero era dura y el tamaño seguía asombrándome. Me entretuve pensando
cómo sería el chorro de leche de esta negra cayendo sobre mi pecho, cuál sería el tamaño verdadero en su máxima exitación de este inmenso tronco, pero eso
fue fatal, pues me sobreexcité y sentí que me iba a correr.
XXX
Le dije a la negra que me corría. Siempre aviso por
respeto y consideración con quien comparto una follada. Hay tíos que les gusta
tragar la leche, otros quieren que se la des en la cara o en el pecho, otros prefieren
solo ver cómo te corres. Pues la negra no perdió su tiempo y comenzó a moverse
rápido su culo, era una maquina de follar, todo su cuerpo se estremecía..., y ¡puf!, me corrí.
XXX
La negra iba a coger el condon lleno de semen y quizás
de mierda, pero le dije que no, que yo lo retiraba. Me lo quité y la negra se
lanzó de nuevo a mi pene, esta vez directamente al glande, chupando y sacando
los últimos vestigios seminales de mis cojones.
XXX
Llegué un momento en que no aguanté más y lo tuve que
apartar. Le agradecí dándole un besito en la boca.
XXX
Recuerdo que me fui a duchar. Luego me tomé algunas
cervezas en el bar y cuando creí que estaba listo para otra follada, me adentré
al sauna de vapor y ¿no sabéis con quién me topé? Pues sí, la negra estaba allí
esperándome. Le ofrecí de nuevo mi polla y repetimos gustosos con la misma
intensidad de la primera vez. ¡Esto es un deja vú! Pensé.
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Después de esta segunda follada decidí ducharme de nuevo
e ir a casa. La negra tenía un nuevo arsenal de condones, para ella, la noche
apenas comenzaba.
Buenas tardes, nos gustaría contactar contigo. Por favor, escríbenos al e-mail cruisingmad@gmail.com
ResponderEliminarhttp://cruisingmad.com/
cruising MADRID
¡Claro que sí! ¡Ya mismo os escribo!
EliminarNice! :)
ResponderEliminarThanks!
ResponderEliminarAy, mami, que será lo que tiene el negro, jajaja ;-)
ResponderEliminarTe comprendo perfectamente cuando dices que ibas a la sauna solo a relajarse sin previas intenciones. Eso me pasa a menudo, en más porcentaje que a tí.
Y también el hecho de quedarte simplemente viendo porque una escena te parece hermosa, sin que te llegue a excitar ( o si) pero no quieres intervenir para no romper la magia.
Me ha encantado lo de la paja mortuoria. Y cuantas hay de estas !!!. Con tu permiso te tomo la expresión. Seguro que saldrá en más de algún post mío.
Repetir dos veces con el mismo y para bien, es todo un éxito. Con un negrazo ya debe ser la gloria !
¿Qué te puedo decir? ¡Era una enorme polla! ¡Y adelante! ¡Puedes usar lo de 'paja mortuoria! je je je
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